Trufa es un amor de perrita que se derrite por una caricia, por un abrazo, por pasar un ratito a tu lado.

A Trufa la adoptaron junto a Gandhi con sólo 2 meses. Todo el mundo la quería, era una cachorrita divertida y preciosa. Estuvo en su nuevo hogar por 2 años, pero la devolvieron, junto a Gandhi. Ahora viven juntos en el refugio.

Ahora con 3 años, sigue siendo la misma cachorra con ganas de jugar, de compartir experiencias, pero hay una gran diferencia: que ahora NADIE ha preguntado por ella. Es muy buena, cariñosa, obediente y lista, le encanta pasear, se porta muy bien, así que no entiende nada.

Lleva más de un año en el refugio esta vez  y, la verdad es, que no tiene nada de divertido, las horas pasan muy lentas, el invierno es muy duro, el verano insoportable....esta no es la vida que se merece. Está triste, y sólo busca que la acaricies. No entiendo porque antes tenia una familia y ahora vive en el refugio, que aunque intentamos darles todo el amor posible, no es, ni de lejos, igual que tener un hogar y una familia que te quiere y te cuide.

¿Quieres conocerla? No te arrepentirás, ¡es todo amor!